San Alejandro Svirski
 

 

Egúmeno santo, 1448-1533. Iglesia Rusa. Su memoria se celebra el 30 de Agosto.

La biografía de Alexander fue redactada por su discípulo y sucesor en el egumenado, Erodión, solamente doce años después de su muerte.- El valor de la obra está ligado al conocimiento personal que el autor tenía del protagonista. El inspirador de la biografía fue el metropolita Macario, que preparaba la canonización de Alejandro en el sínodo de 1545. La Vida se inspira en las biografías de San Sergio de Radonetz, de Cirilo Belozerskij y Barlamio Chutinskij. El oficio litúrgico más antiguo escrito en su honor es del 1565; en 1641 se hicieron algunos agregados con ocasión del descubrimiento de sus reliquias. Son numerosas las iglesias y capillas dedicadas a San Alejandro; en Moscú, en la catedral de San Basilio en la plaza Roja, existe un altar en su honor.

VIDA:

1) EL JOVEN MONJE. Alejandro nació el 15 de junio de 1448 en la pequeña aldea de Mandera (región de Novgorod), situada en al confluencia de los ríos Svir y Ojar, frente al monasterio Ostrovskij dedicado a la Presentación de María al Templo. Sus padres, Esteban y Vassa, eran agricultores modestos y devotos, que dieron una cuidadosa educación cristiana a sus hijos. Alejandro vio la luz cuando sus hermanos ya estaban casados; en el bautismo recibió el nombre de Amos. 
Aunque no era estudioso por naturaleza, por intercesión de María, Amos obtuvo un gran amor por la instrucción, sobre todo en lo que respecta a la Sagrada Escritura. Un día, no lejos de la aldea natal, el joven encontró los monjes del monasterio de Valaam; entre ellos había un famoso anciano (Staretz) al que Amos reveló el deseo de consagrarse completamente al Señor. Sin embargo los padres querían que contrajera matrimonio, pero Amos, obtenida con astucia su bendición, se fue el monasterio de Valaam. Atravesando el río Svir, a las orilla del lago Ropscinskij, Amos sintió una voz misteriosa que le comunicaba que en aquel mismo lugar, un día, fundaría un monasterio. A los 26 años pronunció los votos monásticos y tomó el nombre de Alejandro. Con gran dedicación, el joven religioso se dedicó a practicar las virtudes de obediencia, humildad y laboriosidad. Después de tres años de vida religiosa, los habitantes de la región, habiendo notado la presencia del monje, informaron a los padres de Amos acerca del lugar de residencia del hijo y sobre su profesión religiosa. Inmediatamente su padre, Esteban, encolerizado, se dirigió al monasterio con el propósito de llevarse al hijo rebelde a casa. Para evitar encontrar al padre, Alejandro declaró su intención de no abandonar su celda por ningún motivo; fue solamente por obediencia hacia el egúmeno que consintió el encuentro con el padre. Durante el coloquio, el monje no solamente trató de tranquilizar al padre sino que hizo de todo para persuadirlo a abandonar el mundo y abrazar la vida monástica junto con su madre. Los padres siguieron la invitación del hijo: Esteban entró en el monasterio Ostrovskij de la Presentación de María al templo, tomando el nombre de Sergio, y Vassa se hizo religiosa en el monasterio femenino local, asumiendo el nombre de Bárbara.

2) EL EREMITA. Alejandro continuaba practicando una vida ascética intensa suscitando la admiración incluso de los monjes más exigentes del monasterio de Valaam. Pero deseando vivir en soledad, se retiró a una isla deshabitada, que seguidamente fue llamada “santa”. Allí permaneció durante trece años. Todavía hoy se conservan los rastros de su austera presencia: la habitación, constituida por una gruta angosta y húmeda, situada en la cresa de una roca sobre la cima de un monte rocoso que se podía alcanzar solamente con una escalera empinada por la que podía pasar una sola persona, y la tumba que el religioso se había excavado cerca de la caverna. Durante su período de soledad, Alejandro tuvo una visión, en la que expresó que muchos ascetas se habrían acercado a él y que él mismo se habría transformado en su maestro espiritual. 
Un día llegó a la isla un cazador que seguía un ciervo: era Andrés Zavalishin, que se quedó conversando con el monje acerca de los problemas de la vida espiritual y decidió finalmente permanecer junto a él. Muchos conocidos de Andrés se enteraron de su decisión, y su ejemplo fue seguido por su hermano Juan, que encontró una muerte prematura. Comenzaron a llegar a la isla numerosos aspirantes a la vida monástica y Alejandro pensó en construir un monasterio. Prepararon algunas celdas y una iglesia de madera en honor de la Santísima Trinidad. Tenían necesidad de un presbítero y de un egúmeno: el arzobispo de Nvgorod, san Serapión, confirió a Alejandro la ordenación sacerdotal designándolo egúmeno del monasterio en construcción. Como superior, Alejandro daba el ejemplo de la más perfecta observancia monástica: llevaba el agua a la cocina, cortaba la leña, cocía los panes, sembraba el grano y trataba de socorrer a todos los necesitados que llegaban al lugar.

3) CONSTRUCTOR DE UN MONASTERIO. Crecido el número de monjes construyeron una iglesia de piedra en honor de la Protección de la Madre de Dios y se le agregaron el refectorio, el molino y el cementerio.
El egúmeno llevaba siempre un hábito pesado y remendado; de noche se dedicaba a la oración y al trabajo. Según el ejemplo de san Teodoro de la laura de las grutas de Kiev, exigía de los hermanos una escrupulosa observancia de la regla monástica. De noche pasaba por las celdas de los religiosos y si sentía charlar, llamaba a los responsables a la mañana siguiente, los amonestaba y si fuese el caso, imponía severas penitencias.
Acercándose al final de su vida, Alejandro eligió cuatro santos monjes, uno de los cuales, según voluntad divina, tomaría su sucesión en la dirección del convento. En su testamento se dirigía al Metropolita Macario, pidiéndole que se ocupase del monasterio y de su superior. 
Hasta los últimos días de su vida muchos devotos recurrieron a él para obtener consejo espiritual y recibir su bendición.
Alejandro murió el 30 de Agosto de 1533 a los 85 años de edad, pronunciando la invocación “Señor, recibe mi espíritu”.
En 1547 Alejandro fue inscripto en el albo de los santos y en 1641 se descubrieron sus reliquias incorruptas, cuando fue edificada una nueva iglesia. Hasta los años veinte del siglo XX sus reliquias se custodiaban en un sepulcro de plata en la catedral de la transfiguración del monasterio Svirskij. 
Su memoria se celebra cada año el 30 de Agosto. 
La importancia espiritual de san Alejandro se puede parangonar con la de San Sergio de Radonetz. Fue el maestro de una multitud de santos y de ascetas de las regiones nórdicas de Rusia entre los cuales se pueden nombrar: ADRIAN ONDRUSOVSKIJ, NICÉFORO Y GENADIO VAZEOZERSKIE, ALEJANDRO KUTSKIJ, JONÁS JAZEZERSKIJ, ATANASIO SJANDEMSKIJ, Joasaf Maseozerskij y Casiano Slomenskij.

4) ICONOGRAFÍA. Su iconografía sigue los cánones de la representación de los santos monjes. Sin embargo la visión mística que Alejandro tuvo de la Trinidad influyó en la formación de sus imágenes en los iconos. La “manifestación de la Trinidad a Alejandro” está representada tanto en las escenas de la vida, en el marco del icono del santo, o como icono en sí mismo del mismo modo que sucede con los iconos que representan la “manifestación de la Madre de Dios a san Sergio de Radonetz”. Habitualmente Alejandro es representado arrodillado delante de los tres ángeles, con el fondo de su celda de madera o de un bosque movido por el viento.

Stefano Virgulin
Irina Jazykova
Traductor: Alejandro Ferreirós